El Punto de equilibrio / Columna de Pablo Furnari – De líderes, no líderes y liderados

De líderes, no líderes y liderados
Por Pablo Furnari

El liderazgo es algo que trasciende los ámbitos. El deporte, la política, el trabajo…En todos ellos el liderazgo juega un factor fundamental.

Tuve el privilegio que Enrique Macaya Márquez prologue mi último libro “Todos Somos DT”. No es un libro de deporte, es de management y gestión. Un paralelismo entre las claves de éxito en el mundo del deporte aplicadas a cualquier negocio.

Cuando tuvimos la primera charla para empezar a trazar algunas líneas del prólogo (marzo de 2017) empezamos a hablar de un tema central del libro que es justamente “liderazgo”.
Y naturalmente salió el tema si Messi es o no líder.
Toco este tema por todo lo que viene pasando alrededor del mundial, por todo lo que se viene hablando de Messi poniéndolo nuevamente en el centro de la escena con críticas.

Macaya hace mas de un año me decía “…personalmente creo que hay condiciones necesarias para ser líder. Divido esto de la siguiente forma; primero diferencio al ídolo – a ese excelente jugador – del crack. ¿Qué es ser crack? El crack debe tener una cantidad de virtudes que no tienen los jugadores excelentes. Pero hay una virtud que tiene todo crack la cual es una cuota de liderazgo. Cracks eran Alfredo Distéfano, Cruyff, Pelé y Maradona.”

“¿Y Messi?” Le pregunté.

“Empezó siendo capitán cuando fue dirigido por Sabella para ver si terminaba siendo líder a través de la autoridad que le daba la capitanía, pero no desde el carácter. No es fácil “hacer” a un líder. No se hace a través de toque con una varita mágica. Las aptitudes de líder terminaron siendo las de Mascherano. Él fue el que olfateó la necesidad del liderazgo y la cumplió. Esto demuestra que no necesariamente para ser líder hay que ser el mejor técnicamente…”

Desde hace tiempo opto por explicar cuestiones sencillas de la vida diaria empresaria desde el ángulo del deporte, con particular enfoque en el fútbol por todo lo que representa para nuestra sociedad.

Para comprender este enfoque hago un enfoque similar entre lo que es un gerente – al cual llamo “gerente DT” – y el empleado al cual identifico como “jugador empleado”.

Casi siempre atribuyo la mayor parte de la responsabilidad por el éxito y el fracaso de cualquier negocio a la habilidad del “gerente DT” en el armado de sus equipos de trabajo.

“La primera conjetura que se hace sobre el talento de un príncipe es ver los hombres que tiene alrededor. Cuando son suficientes y fieles, siempre se lo puede considerar inteligente, porque ha sabido conocerlos bien y mantenerlos fieles. Pero cuando sean de otro modo, siempre se puede formar sobre él un juicio poco favorable, pues el primer error que comete, lo comete en esta elección.”(Consejo de Maquiavelo a Cesar Borgia – El Príncipe)

Armar un equipo de trabajo, independientemente para que sea, requiere de dos cosas muy importantes.

La primera son los recursos que tenemos para disponer de los mejores “jugadores empleados” que podamos.

Y la segunda, la capacidad del “Gerente DT” en la ingeniería humana necesaria para lograr armonía entre su gente y que por sobretodo cada “jugador” este en el puesto adecuado. Uno de los mayores retos es encontrar unidad entre la diversidad. La unidad implica cualidad de ser un equipo. Pero dicha cualidad no necesariamente implica semejanza de los integrantes, por el contrario implica complementación!

Recién a partir de estas dos cosas podemos construir una tercera.

Formar un equipo no termina cuando resolvemos el problema de ingeniería social.

A partir de este punto tenemos que trabajar con los “empleados jugadores” para conectarlos con algo mas grande que ellos mismos.

Crear un equipo exitoso, requiere que los individuos involucrados renuncien a sus intereses para la mejor conveniencia afín que la totalidad del grupo sume más que la totalidad de las partes. Desde ya esto no es fácil en estos tiempos en donde el pasatiempo número uno es la exaltación del ego.

“Los buenos equipos acaban por ser grandes equipos cuando sus integrantes confían los unos en los otros lo suficiente como para renunciar al ‘yo’ por el ‘nosotros’.” (Phil Jackson, Manager y ex DT multicampeon de la NBA)

Cada negocio tiene un potencial de ingresos que le permite tener un recurso limitado en sueldos, honorarios, comisiones, etc., de la gente que trabaja en el mismo.

Los recursos en personal del dueño de un restaurante, de un consultorio odontológico, de una Pyme industrial o de una empresa multinacional, por citar ejemplos, no son los mismos.

La secretaria de un presidente de una gran empresa, no gana lo mismo que la recepcionista de un consultorio médico. ¿Esto implica que esta última sea menos considerada por su “DT” que en el primer caso? Seguramente no! Es más, me atrevería a decir que en algunos casos tienen más responsabilidades y tareas y son mas imprescindibles, especialmente en reemplazos por ausencias, en el consultorio médico que en la gran empresa.

Uno debe ser asertivo con lo que dispone. Tener a los mejores jugadores en la cancha no es suficiente, uno debe tener los mejores jugadores en las posiciones correctas. Y si no tenemos los recursos para tener a los mejores, al menos tengamos lo que podamos en donde mejor se desempeñen, en su zona de fortaleza. Esto técnicamente se llama “buscar el trade off” o punto de equilibrio entre lo óptimo y lo que podemos.

Para colocar a las personas en su zona de fortaleza hay que tener en cuenta que cada “empleado jugador” tiene un lugar donde dar lo mejor de sí. Cuando los líderes entienden esto, cuando el “Gerente DT” sabe la aptitud de cada uno de sus jugadores, sus equipos se desempeñan en un nivel superior.

Con esto quiero decir que con solo importa el plantel, sino cómo ubicamos a cada integrante dentro del equipo.

“Es como en el sexo…si el jugador no quiere en determinada posición, no hay que insistirle.” (Carlos Bilardo)

Tener a las personas idóneas en los puestos adecuados es esencial para el éxito individual como “DT’s” y colectivo como equipo.

Desde hace muchos años estoy en contacto permanente con gente de empresa, de cualquier tipo de negocios y de cualquier punto geográfico. Cuando analizo qué pasa entre el comportamiento o desempeño de la gente versus los resultados de las empresas, negocios, etc., veo mas o menos lo siguiente:

– Cuando ponemos a la persona equivocada en el puesto equivocado no solo no se progresa sino hay una regresión de esa persona.- La persona equivocada en el lugar adecuado, es decir en el lugar donde necesitamos gente, se genera frustración tanto de la persona como nuestra.- La persona idónea en el lugar equivocado genera confusión, porque sus aptitudes no están para lo que hace y se aburre…- La persona idónea en el lugar adecuado, es muy bueno pero…- “Las” personas idóneas en “los” lugares adecuados genera el verdadero equipo.

Hay que liderar a cada uno de nuestro equipo de distinta manera. No todo el mundo responde al mismo estilo de liderazgo.Cierta vez escuche una frase inteligente, de esas tantas con las que uno se cruza en la vida, respecto a la forma de educar a los hijos. Dice “un padre inteligente trata a sus hijos por igual, es decir a cada uno de modo diferente”.

Cuando tengamos en nuestro equipo “jugadores empleados” con talento y que destacan, debemos saber que el “gran” talento no es muy amable con quienes no lo tienen. De manera que hagamos un favor al talentoso: no lo rodeemos de gente de segunda… rodeémoslo de lo mejor que podamos!

*Pablo Furnari  Director General – Programa Primera Exportación

Seminario Webinar en alianza con DHL Express – Ser resiliente, no mirar atrás y bancar

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 Pablo Furnari

¡Gracias por inspirarnos Pablo!

Con el apoyo de:

DHL Express – Excellence. Simply Delivered.

La importancia de crear un equipo de comercio exterior / Columna de Pablo Furnari – La Nación

“La primera opinión que se forma sobre la inteligencia de un líder se basa en la calidad de los hombres que se encuentran a su alrededor. Cuando son competentes y leales, él siempre será considerado sabio, porque ha sido capaz de reconocer sus competencias y mantenerlos leales” 
Maquiavelo

Un departamento de comercio exterior trata justamente de un equipo de trabajo, de una estructura humana, cuyo fin es muy concreto: desarrollar la estrategia y ejecutar el plan de negocios impuestos por la alta gerencia de la empresa.

En una organización cada persona tiene un lugar donde dar lo mejor de sí. El departamento “comex” no es la excepción. Y cuando quien lidera la empresa o el proyecto de exportación/importación entiende esto, sus equipos se desempeñan en un nivel increíble.
Pero la experiencia nos dice que en los casos inversos las frustraciones son altas, motivo por el cual es de suma importancia el equipo con el cual vamos a impulsar el proyecto.

Tener a los mejores jugadores en la “cancha” no es suficiente, uno debe tener los mejores jugadores en las posiciones correctas.

Y si somos una empresa que no tiene los recursos suficientes para contratar “figuras”, por lo menos procuremos que quienes conformen el equipo de trabajo estén en el lugar indicado.
Cómo formar una oficina de comercio exterior cuando aún no exportamos
Teniendo en cuenta que la exportación no es más que el resultado de la ejecución de la estrategia acorde con el plan de negocios que hemos diseñado, diremos que la oficina “comex” es un instrumento que lleva a cabo todas las acciones inherentes para llevar adelante esa estrategia.

El tamaño de la empresa determina el tamaño del departamento de comercio exterior y de los recursos humanos con los cuales pueda contar en forma permanente y contratar de modo temporal.
Para muchas pymes esto parece el caso del huevo y la gallina. Les es difícil tomar la decisión de emplear una persona cuando aún no generaron negocios que sustenten el costo de esa mínima estructura.
Prima facie, en la mayoría de las pymes que se inician en las exportaciones es el propio dueño o director de la empresa quien realiza las primeras acciones. Muy a menudo involucra al departamento comercial o de marketing.
Esto puede que salga bien o no. Dependerá del perfil de la persona que lo lleve adelante, especialmente en la segunda variante.
No siempre nuestro mejor vendedor en el mercado interno es igual de bueno en el exterior, por no decir “rara vez”. Hay cuestiones que tienen que ver con aptitudes y conocimientos en materia técnica que implican estar medianamente preparados antes de hablar con algún posible comprador.
También comprende poseer las destrezas suficientes como para saber analizar a qué mercado ir, dónde buscar información, cómo determinar el precio de exportación, qué decisiones tomar en materia de agentes y distribuidores, etc.
Pero atención: esto no implica que debamos dejar de lado al mejor vendedor en el mercado interno.
En tal sentido, que esta persona acompañe en algún viaje al exterior, que forme parte de alguna feria en donde participe la empresa, estando en el stand, recorriendo otras empresas, participando de conferencias, yendo a cursos, etc., como todo aquello que le dé mayor formación y herramientas, será mejor para nosotros y nuestras aspiraciones.
En la práctica, muchas veces sucede que la empresa que quiere comenzar a exportar toma a jóvenes profesionales recién graduados e incluso a estudiantes de carreras afines al comercio internacional para que procuren exportar los productos de la empresa. Esto no está mal, pero debemos tomar nota de algunas cuestiones.
Un error frecuente: la empresa sin experiencia exportadora y la incorporación de un joven profesional.
Si vamos a trabajar con gente a la cual le ofreceremos algún tipo de comisión a resultado sin pagarle una suma fija, sabemos que si esa persona no vende no cobra. Por lo tanto, el mensaje que estaríamos pasando es similar al siguiente: “Si exportamos ganamos, si no exportamos. perdiste”. Esto tal vez no se diga literalmente, pero es lo que en la práctica sucede.
Los jóvenes, en su entusiasmo por querer comenzar a dar sus primeros pasos en la profesión, acceden a este tipo de propuestas, las cuales muy pocas veces, por no decir rara vez, tienen buenos resultados. Y si los han tenido estaríamos hablando de un hallazgo.
Lo primero que sucede cuando los resultados no son los deseados ni se cumplen dentro de un plazo acorde con la espera por parte de quien está tratando de generarlos (en este caso, el joven profesional), empiezan a surgir las frustraciones, que conllevan al desánimo, seguido del abandono del proyecto.
Nuevamente la empresa, considerando que la falta de resultados fue producto de una mala gestión de parte del joven profesional, toma a otro en su reemplazo, a quien probablemente le suceda lo mismo.
Llega un punto en que el empresario, también novato en materia de exportaciones, se frustra, se desanima y abandona el proyecto de exportación.
Decidir exportar es decidir invertir, contemplando recursos económicos, financieros y humanos, entre otros, en pos de concretar nuestra primera exportación. Por consiguiente, si decidimos tomar a una persona para que actúe de departamento de exportaciones, tenemos la obligación de darle las herramientas mínimas para que trabaje en busca de lo que planificamos.

Nota de Pablo Furnari en El punto de equilibrio – Tomás Bulat – Messi: El Unicornio

Messi: El Unicornio

Seguramente escuchaste más de una vez hablar de las empresas “unicornio”. Por definición, un unicornio es un animal fabuloso y mitológico. Pero en los negocios este término tiene una connotación un tanto diferente.Este término se acuñó hace no más de cinco a seis años para un grupo bastante reducido de empresas exitosas cuyas características son bastante homogéneas, todas tecnológicas, y por sobretodo su valor: mil millones de dólares o mas.

En Argentina hay cuatro empresas bajo esta denominación: Mercado Libre, Despegar.com, OLX y Globant.

En el mundo unas cuantas mas: Facebook, Twitter, Linkedin, Uber, Dropbox, Snapchat, etc., entre las mas reconocidas.

¿Qué características en común tienen estas empresas?

–  Son empresas jóvenes, con edades promedio de sus fundadores de poco mas de 30 a como máximo 35 años.

–  Con ideas disruptivas

–  Llegan directamente al cliente

–  Con muy poca credibilidad al inicio

–  Pertenecen al sector tecnológico

–  Se calcula que por cada dólar invertido, se generan 26 mil.

– Todos tuvieron, una vez pasada esa etapa de descreimiento del punto anterior, “ángeles” inversores que generaron que ese proyecto triunfara y sea exitoso.

Se dice que por cada proyecto que llega a ser unicornio, es decir proyectos con características similares, al menos cuatro se caen. Es decir no llegan a progresar en sus inicios, simplemente porque nadie los respalda.

Walt Disney decía que en sus inicios le costó casi llegar a la ruina hasta poder ser exitoso. No tenía respaldo, ya que “los sueños tienen poco crédito” decía.

En 1998 Lio Messi, con 11 años de edad, medía apenas 1,32 metros, la altura correspondiente a un chico de 9 años.

Jugaba en Newell’s Old Boys. El club decidió no pagar el tratamiento con hormonas de crecimiento, que costaba mil dólares por mes. Intento con River, pero tampoco le dio crédito. El club Barcelona absorbió el gasto, Messi creció 23 centímetros y es el mejor futbolista del mundo…

Messi es un caso excepcional. Se puede decir que es un unicornio más de aquellos que comente. Prácticamente cumple con todos los requisitos:

-Está dentro de la edad promedio.

-Es absolutamente disruptivo.

-Llega a su público como nadie.

-No está en el sector tecnológico pero genera subproductos en ese sentido en forma descomunal. Basta con ver juegos de consola, aplicaciones, publicidades, etc., con su marca y nombre.

-No tuvo crédito de nadie al principio, ni del club que lo vio nacer ni de otros cercanos.
-Tuvo un “ángel” inversor llamado Barcelona.

-Cada dólar invertido con muchísima holgura recuperó mas de 26 mil.

-Todo lo que él genera, desde el valor de su pase, sueldo, contratos, sponsors, merchandising, etc. tiene un valor superior a mil millones…

¿Cuántos casos similares habrán quedado por el camino…? Obviamente imposible de saber.

Como afirmaba Schumacher, uno de los ilustres pensadores de la historia de la economía, “lo pequeño es hermoso” …al igual que los unicornios agregaría…

A diferencia de este autor, que incorporaba esta afirmación dentro de la utopía, me permito señalar que la realidad futbolística, como también la empresarial, está llena de agradables sorpresas al alcance de aquellos que sepan explotar sus condiciones con una acertada mezcla de dosis de ingenio y otras de inversión…independientemente del tamaño físico.

http://www.elpuntodeequilibrio.com/Articulo/Vista/Messi+El+Unicornio

 

Revista Pymes – Clarín – Columnista invitado Pablo Furnari – Estresando al mejor empleado

revista pyme

Nota de Pablo Furnari en La Nacion – Éramos pocos y llegaron las redes sociales


No sólo desembarcaron en los negocios internacionales, sino que se volvieron una herramienta clave; hoy 9 de cada 10 personas usan alguna red en el mundo; la importancia de la reputación pública

Pablo Furnari      22 Dic


«Si le parece bien hablemos por skype a las 9 de su país y cerramos el tema.» Siempre fui de la premisa que cualquier empresa puede vender cualquier cosa a cualquier parte del mundo. La cuestión es saber cómo.

Hace unos años, cuando alguien viajaba al exterior tratando de vender sus productos, previa agenda de reuniones cerradas desde acá, no sólo tenía que armarse de lo necesario en materia de objetos personales para su viaje sino de un sinfín de cuestiones relacionadas a lo que pretendía vender. Innumerables cajas con folletos, catálogos, muestras de todo tipo, las cuales debía despachar previamente, buscarla en destino, aunque alguno atinaba a usar un courier para que se las dejara en el hotel.

Hoy cambió mucho todo. No es que ya no sean útiles las muestras, los folletos, etc., sino que cambió la forma de comunicación para un entendimiento mínimo entre dos personas de distintos lugares del mundo que quieren hacer un negocio.

Como comentara un empresario, ya entrado en años: «Eramos pocos y aparecieron las redes sociales».

Y si amigos, desembarcaron las RRSS en los negocios internacionales. No sólo desembarcaron, sino que juegan fuerte.

Siguiendo el ejemplo del hombre que viaja, antes para armar una agenda mínima de reuniones, se necesitaba toda referencia comercial para que del otro lado digan: «Ok, los espero». Hoy tan solo googleando tu nombre y el de tu empresa, dan el like o unlike a tu propuesta en pocos minutos.

Así tengas el mejor producto o servicio, si no estás en «la red» no existís. Si estás a medias, no existís. Si tu sitio está desactualizado, no existís. Y así podría seguir un rato.

Existís si tú web es tu nombre y apellido, tuiteás con hashtag tus productos, los cuales también mostrás en una fanpage de Facebook, tus catálogos están online en Instagram, usás Pinterest de acuerdo al producto, mostrás tus procesos de producción en YouTube, en LinkedIn tu perfil empresario, en Periscope mostrás en streaming tu fábrica, y cerrás por Skype el negocio como al comienzo. Y si querés un toque de distinción procura entrar en Wikipedia.

Hoy, aquello que existe y no se percibe en las redes sociales no existe. Así seas el tipo con el mejor producto exportable. Simplemente no existís.

Allá, lejos y hace tiempo era todo un evolucionado empresario vanguardista quien tuviera un sitio web. Cuando comencé dando conferencias le decía al público: «Levante la mano quien tiene página web». Hoy ni se pregunta si lo tenés, directamente te buscan. Hoy pregunto quién tiene un plan de comunicación internacional a través de RRSS».

Mundo único

Ya no importa en qué parte del mundo está una empresa. Los consumidores ya no se fijan en dónde está la marca que quieren comprar.

Tan sólo algunos indicadores sostienen que 9 de cada 10 personas en el mundo usa al menos una red social. Los consumidores, en especial los jóvenes, dedican más tiempo a las RRSS que a la TV. A partir de este año la publicidad en redes será mayor a la de la prensa escrita. ¡Ya comienzan a haber presupuestos en marketing de influencers! Es decir esa persona famosa, formadora de opinión, con decenas de miles de seguidores, que te postea algo «a favor» de tus productos por algunas monedas.

Y como si fuera poco, la figura del community manager emerge como la nueva figura del equipo. Es decir aquel chico que nos daba una mano con la web y el Facebook, que dependía casi del pasante ahora se transforma en el nuevo agente de ventas internacionales 2.0 y depende del presidente de la empresa. Emerge el gerente de nuevos medios.

Y hay que salir a buscar clientes en el exterior en este nuevo contexto.

Nuestra reputación ante ese posible cliente internacional no sólo es en base a lo que queremos mostrar sino a lo que nuestros clientes locales postean sobre nosotros.

Es decir no sólo tenemos la obligación de estar al día con las redes sino ser sociales en ellas. Podríamos tener un serio dolor de cabeza con posteos mal intencionados de nuestra competencia si no estamos atentos. Los clientes no sólo leen los mensajes dirigidos a ellos sino además miran los dirigidos a nosotros. Es decir estamos en el medio del cambio del paradigma de comunicación entre dos personas de cualquier parte del mundo.

El comercio internacional es por sobretodo sistémico. Las RRSS son una herramienta poderosísima para los negocios y nuestra reputación. Tan poderosa que iguala, ante los ojos del que las visita a una pyme con una gran empresa.

«Ser lo que se desea parecer» decía Sócrates es la mejor manera de ganar una buena reputación. Las RRSS generaron esto en pocos años y serán determinantes en un futuro no muy lejano en el comercio internacional.

El autor es especialista en Management y Marketing Internacional @pablofurnari

Nota de Pablo Furnari en El Punto de equilibrio – Tomás Bulat – Emprendedores Exitosos: El club del 2%…3%

Hace algún tiempo, en el History Channel, documentaron la historia de los que se conocieron, allá por finales del siglo XIX, como las “Gigantes de la Industria”. Hablaban básicamente de Henry Ford, Vanderbilt, J.P Morgan, Rockefeller, Carnegie, etc. Me detuve en este último en particular, Andrew Carnegie. No por su protagonismo de aquella época – llegó a ser el empresario mas poderoso – sino por lo que generó a través de un estudio que le encargó a un joven – por aquel entonces – llamado Napoleon Hill. Carnegie era un tipo muy competitivo que no solamente le interesaba amasar fortuna sino también le interesaba saber cómo los hombres mas ricos del mundo consiguieron lo suya.

De allí que le encarga a Napoleon Hill, estudiar a lo largo de varios años, no solo a los empresarios más prósperos de aquella época sino a todo tipo de celebridad y gente reconocida que tuviera éxito. El propio Carnegie financió este largo proyecto (moneda no le faltaba) y así fue como, durante muchos años, el querido Napoleon se dedicó a entrevistar a esta gente, no solo en USA y Reino Unido sino a cuanta persona estuviera por el mundo y tuviera “éxito”.

Así fue que encontró que todas estas personas, emprendedores por definición, tenían algunos principios casi universales como fórmula de éxito, al margen de lo que cada uno se dedicara. A tal punto fue el estudio que realizó que se dio cuenta que él mismo podía aplicar esos principios y ser tan exitoso como ellos. De allí que sale a la luz uno de los libros, escrito por él, mas vendido de la historia: “Piense y hágase Rico”.

Lo que su estudio determinó es que sólo el 2% de la gente que emprende llegar a ser exitoso en toda su dimensión, es decir solo un selecto “Club del 2%” gana lo que se llama “guita en serio”.

Hill terminó siendo rico en base al propio estudio que le financió Carnegie. Es decir no solo le “averiguó” al querido Andrew como hicieron plata los demás sino que lo aplicó para él! Un piola bárbaro. Esto se escribió en el año 1937.

Hace poco vi una conferencia de Tom Peters – uno de los padres del management moderno – quien revelaba lo siguiente:

Se hizo un estudio sobre un grupo de personas, bastante numeroso, que estaba terminando sus estudios universitarios. Se les realizó una encuesta a poco de finalizar esos estudios en donde se les preguntaba acerca de sus objetivos inmediatos y de mediano plazo en cuanto a su profesión y al mundo de los negocios, justamente porque estaban a punto de  egresar y por lo tanto iniciando un camino (al menos es la lógica) hacia lo que consideraban sus aspiraciones profesionales.

Esa encuesta dio como resultado que sólo el 3% del grupo sabía muy claramente hacia dónde se dirigían profesionalmente mientras que el noventa y siete restante no.

Fueron realizando un seguimiento de todos los casos durante varios años, como parte de ese estudio, y al finalizar se hizo un comparativo entre aquellos que tenían muy clara su meta profesional versus aquellos que no.

Se constató que quienes tenían muy claros sus objetivos los habían cumplido y quienes no lo tenían no. O sea quienes habían visionado su futuro llegaron a donde quisieron llegar mientras que los que no tuvieron visión no llegaron a nada e incluso hasta habían cambiado, muchos de ellos, de profesión.

Pero un dato aún más revelador demostró que el 3% de la gente consiguió el noventa y ocho por ciento de los ingresos totales del grupo y sólo el dos por ciento restante quedo en manos del noventa y siete por ciento de la gente. Se conoció a este grupo como “el Club del 3%”.

En otras palabras; cien años antes o cien años después, desde aquel libro de Napoleon Hill a este estudio de nuestros días, los principios básicos para que un emprendedor gane dinero son los mismos!

La visión de futuro es fundamental para el desarrollo profesional. Saber hacia dónde vamos profesionalmente, más allá que luego la vida y el aprendizaje continuo te vaya indicando el camino, es una, sino la más importante, clave de éxito que puede tener un emprendedor.

@pablofurnari

http://www.elpuntodeequilibrio.com/Articulo/Vista/Emprendedores+exitosos+El+Club+del+2…3

 

Juguemos a ser Guardiola por un momento

Por Pablo Furnari

«Siempre nos habían dicho `no, es que todos sois iguales… para mi todos sois iguales´, y es la mentira mayor que existe en el deporte. No todos son iguales, ni todos tienen que ser tratados igual».

Estas son palabras de Josep Guardiola en una entrevista que le realizaron hace algún tiempo. Y me parece una de las frases más brillantes, menos hipócrita, más categórica y descriptiva de una forma de liderar a un grupo o equipo de trabajo.

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En la Argentina, sólo 3 de cada 10 puestos directivos son ocupados por mujeres

La participación de las mujeres en los puestos directivos de las empresas ,en los niveles altos y medios– no progresó mucho en las últimas dos décadas: al ritmo actual, llevaría entre 100 y 200 años alcanzar la «igualdad de género» en la dirección de las compañías.

Esta es una de las conclusiones de un estudio presentado ayer por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que realizó una encuesta entre 1.200 empresas de todo el mundo. Según el relevamiento, en la Argentina el porcentaje de mujeres sobre el total de directores de empresas es de 31%. Tres de cada diez puestos directivos son ocupados por mujeres. Esto ubica al país en el puesto número 56 en un ranking de 108 países. Si se compara con otros países de la región, la Argentina no está en la mejor posición. Hay más puestos directivos ocupados por mujeres en, por ejemplo, Colombia (53,1%), Uruguay (43,9%), Brasil (37,3%), Bolivia (35,1%), Venezuela (33,4%) y México (32,1%). Por debajo de los números de la Argentina, están Perú (29,3%) y Chile (23,6%).

«Es fundamental que sean más numerosas las mujeres que ocupan cargos de nivel directivo superior para constituir una reserva de posibles candidaturas para los cargos máximos como el de director general o presidente de una empresa», explicó la organización en su informe donde, además, subrayó la existencia de «barreras invisibles» para el ascenso de las mujeres hacía la cúpula de las empresas.

Una de las barreras mencionadas es que las mujeres se concentran en ciertos tipos de funciones directivas, como recursos humanos, comunicación y administración. Pero las principales son las mayores responsabilidades en el hogar que tienen las mujeres, el predominio de la cultura empresarial masculina y la falta de estímulo para que los hombres pidan licencias relacionadas con temas familiares. También se destaca la necesidad de resolver el fenómeno que lleva a que las mujeres queden rezagadas a pesar de su alto nivel de educación.

Muchas mujeres sostienen que no quieren un trato especial ni cupos para avanzar en su carrera, pero que sí necesitan soluciones flexibles para organizar el tiempo dedicado al trabajo y a las obligaciones familiares. Frente a estos problemas, desde la OIT recomendaron a las empresas ofrecer una cobertura de protección de la maternidad y ayuda para el cuidado de los niños, para que las empresas puedan retener a las mujeres talentosas.

Por otro lado, los datos relevados mostraron que, a nivel global, en el 30% de empresas directamente no hay ninguna mujer en las juntas directivas. Sólo en los países nórdicos y en el Reino Unido, el porcentaje de lugares ocupados por mujeres supera el 20%. Brasil, México, España y China se encuentran en el grupo de países donde las mujeres ocupan entre el 5% y el 10% de los asientos en las juntas directivas. Y Chile, India, Japón y Rusia están entre los que esa presencia se reduce a menos del 5 por ciento.

«A nivel global, sólo el 5% o menos de los directores ejecutivos de las principales corporaciones son mujeres, lo que subraya el hecho de que cuanto más grande es la empresa menor es la probabilidad de que sea dirigida por una mujer», señaló la OIT en su informe. La relativa exclusión de las mujeres de los altos estamentos de decisión empresarial ocurre a pesar de que son las dueñas y administradoras del 30% de las empresas, generalmente micro y pequeñas.

Para la OIT, además, el llamado «techo de cristal», que excluye a las mujeres acceder a los altos cargos, sigue «intacto» y el talento femenino está «subutilizado». «No obstante, están ampliamente demostrados los beneficios que supone para las empresas el aprovechamiento del acervo de competencias que representa la mujer, en particular el hecho de estar en sintonía con un mercado de consumo orientado cada vez más por mujeres, sacar provecho de la innovación y la creatividad propios de la diversidad de género, mejorar la gestión empresarial y, por ende, los resultados de las empresas», señaló la organización en su informe.

 

El arte de la estrategia en los negocios

Por Pablo Furnari

«La estrategia es el uso del encuentro para alcanzar el objetivo… Por lo tanto, debe imprimir un propósito a toda la acción…, propósito que debe concordar con el objetivo…

En otras palabras, la estrategia traza el plan… y, para el propósito aludido, añade la serie de actos que conducirán a ese propósito… La estrategia determina el lugar donde habrá de emplearse la fuerza…, el tiempo en que ésta será utilizada y la magnitud que tendrá que adquirir. Esa triple determinación asume una influencia fundamental en el resultado del encuentro”. Carl Von Clausewitz

“El arte de la estrategia es de importancia vital…. Es el terreno de la vida y la muerte, el camino a la seguridad o la ruina”. Sun Tzu Leer más